Un Maronda muy íntimo

Escrito por Alicia Civera

Un espacio reducido y Pablo Maronda muy cerca, un concierto íntimo pero lleno de gente que susurraba las letras del último disco 'La Orfebrería según los místicos' con timidez. Que mejor forma que pasar una tarde de jueves en Slaughterhouse, un pequeño y agradable bar situado en Ruzafa, escuchando un acústico.

Con algo de retraso pero con un ambiente muy relajado y agradable Pablo Maronda, esta vez sin Marc Greenwood, tocó algunas canciones de su nuevo trabajo y alguna que otra versión. Empezó con 'He hablado con ella', metiéndose al público en el bolsillo, siguiendo con 'La Cristiandad' o 'La Recriminación'. Poco a poco los asistentes se fueron descarando y demostraron que se sabían las letras, haciendo coros tímidamente con 'Vivimos en democracia'.

Lo mejor de todo es el anuncio de que habrá nuevo disco próximamente, de hecho nos obsequió con un adelanto en forma de canción que dice algo como: "Ni muy sobrios, ni muy templados, a esta hora de la noche ya no hay nada de que hablar...". 

En septiembre grabarán su próximo trabajo, ahora buscan lugar grabación quizás Murcia, quizás otra ubicación, pero 2014 promete para este grupo valenciano que pronto nos obsequiará con nuevos temas. Además, se acaba de reeditar 'La Orfebrería según los místicos', y puede adquirirse en vinilo.

'Las luces resplandecen' y 'Volverás' fueron algunos de los últimos temas que pusieron el broche a una tarde musical en Ruzafa. 

Dcode: una jornada de festival

Escrito por: Alicia Civera

Un sólo día de festival con un cartel espectacular, en Madrid y con 25.000 abonos vendidos. El Dcode llenó su recinto hasta los topes, con mucha policía vigilando los alrededores de la Universidad Complutense, con un nivel musical para caerse de culo y con unas instalaciones que necesitan perfeccionarse (yo es que me fijo en todo).

Con sol empezaba Varry Brava siempre radiactivos aunque cortos, porque solo tocaron 30 minustos y nos quedamos con muchas ganas de más baile y color. Como siempre destacaron los estelismos de Óscar (cantante) y Aaron (teclados), aunque nos declaramos fans del look rollo domador del segundo.

La tarde nos enamoraba con Izal, o era Izal el que nos enamoraba, o su cantante, o su cantante con ukelele o esas canciones tan melodiosas con letras suaves. El caso es que también se nos hizo muy corto, otros 30 minutos.

Love Of Lesbian tocó una hora pero claro, como no nos va a parecer poco. Santi Balmes y los suyos nos hicerns cantar y brincar con canciones como 'Club de fans de John Boy', 'Me amo' y 'Algunas plantas'. Balmes con sombrero de pez nos volvió a cautivar y compartió escenario con Eva Amaral para el tema, 'Segundo Asalto' sin duda un momento muy entrañable del Dcode. Finalizaron con 'Si tu me dices Ben, yo digo Aflleck'.

Amaral, pese a no estar incluido en nuestro abanico musical, se dejó sin duda la piel en el escenario. Con un mini vestido de lentejuelas negras desgarró su voz para obsequiarnos con canciones de su carrera musical. Por otra parte Vampire Weekend derrocharon espectáculo con sus mejores temas, sin duda un imprescindible para ver en directo.

Franz Ferdinand, lo mejor del festival sin duda, combinando canciones de su nuevo trabajo 'Right Thoughts, Right Words, Right Action',con temazos que hacían vibrar a todo el recinto de la Universidad Complutense. Y digo vibrar porque había tantísima gente que éramos incapaces de movernos ni un centímero. Sin duda eran cabeza de cartel y los más esperado.

Nosotros os hemos contado nuestros preferidos pero en el cartel también estba Foals, L.A o Capital Cities que repitieron en el Dcode con un gran éxito. Respecto a las instalaciones, faltaban baños, puestos de comida y sitios donde cambiar tokens, colas y paciencia para todo en una ubicación excelente, Complejo deportivo Cantarranas.

Y para terminar con un cotilleo hasta la princesa Letizia no quiso faltar a la cita y se pegó unos bailes con la música de los escoceses Franz Ferdinan.